La salud, que como el tiempo son los bienes mas preciados del ser humano, parece que para los presidentes en algunos países de Latinoamérica se considera un “secreto de Estado”, un aura de misterio que suma al problema médico uno político. Salud secreto de estado y mentiras verdaderas-
La conmoción que generó el lunes el anuncio de que la mandataria argentina, Cristina Fernández, tendrá que ser intervenida el martes para la “evacuación quirúrgica” del hematoma cerebral que le fue diagnosticado el sábado, trae a la memoria los recientes episodios de otros gobernantes.
El reciente caso del venezolano Hugo Chávez, quien murió en marzo pasado tras luchar durante 20 meses con un cáncer, una enfermedad que siempre estuvo rodeada por un hermetismo absoluto y aún hoy no se sabe qué tipo de cáncer padecía, y mas la fecha exacta de su muerte. Tema importante porque permitió la anticonstitucional toma del poder de Nicolás Maduro, que ni siquiera es Venezolano ya que nació en Cuca Colombia-
En la argentina mientras se estudia el caso de la enfermedad de Cristina ha asumido a semejanza el delincuente y con innumerables causas pendientes Amado Boudu.
En la etapa final de su convalecencia y cuando ya había sido operado por cuarta vez en Cuba, el gobierno comenzó a difundir información aunque nunca en términos médicos.
LO mismo ya había ocurrido en Cuba, tal como se evidenció en el 2006, cuando el entonces gobernante Fidel Castro delegó el poder por una grave enfermedad declarada “secreto de Estado”. Un cáncer…..que aún no se sabe si existe o alguna vez existió y fue superado.
Una situación similar se presenta en Nicaragua, donde el gobierno de Daniel Ortega cuida con recelo la información sobre cualquier tema.
Por ejemplo, nunca se ha pronunciado sobre una supuesta enfermedad de Ortega en la sangre, que no le permite exponerse al sol por más de una hora, por la que todas sus actividades son programadas en la noche, según dijo el sacerdote y poeta Ernesto Cardenal hace algunos años. ( Fuente del Nuevo Herald.com)
En Brasil, En cambio el país mas fuerte de la región, aunque ninguna legislación obliga a informar sobre la salud de los presidentes o ex jefes de Estado, se trató con absoluta transparencia el cáncer de laringe que le fue detectado a Luiz Inácio Lula da Silva en el 2010, meses después de haberle traspasado el poder a Dilma Rousseff, y eran los médicos, y no el gobierno, quienes informaban.
La propia Rousseff sufrió un cáncer linfático en el 2009, cuando era ministra de la Presidencia, y también se dio a conocer puntualmente la aparición de la enfermedad y datos sobre su tratamiento.
Amigos, recuerden que la incertidumbre, la mentira, las mentiras verdaderas, y la falta de seriedad, sumados a la inflación, e inseguridad convierten por estos días a países como Argentina, Venezuela, Cuba, y ecuador, como invivibles.
Para Jordiweb, Dr. Jordi M Becerro Barcelona España.
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